Dos palabras [Oneshot]

Título: Dos palabras
Autor: yuumhi

Género: Shonen-ai

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“Te odio”

Sólo habían bastado esas palabras, palabras que lo hicieron sumirse en un profunda depresión, las palabras más aborrecidas en toda su vida, gracias a ella no podía descansar del todo bien, pero eso no impedía que…
- Inoo-kun, Inoo-kun ¡¡¡¡INOO!!!! –
El nombrado escapo de sus pensamientos para mirar al dueño de su escapatoria
- Estas en nada – dijo en mil pucheros la persona en frente de él
- ¿Qué decías? – Trató de seguir la conversación
- Hoy… ¿regresamos juntos?- suspiró
- ¿Ah? ¿Qué… qué decías? – el mayor se había vuelto a distraer y eso molestaba al menor, en absoluto, tratando de no hacer notoria su molestia contestó
-No, nada – planeaba dejar solo al mayor pero siente que lo sujetan de la muñeca…
-matte Dai-chan –
Se detuvo, luego sintió la respiración del mayor muy cerca de él
- Repite… repite lo que acabas de decir – preguntó suavemente el mayor
- ¿Re-regresamos juntos? -
- Bien – respondió el mayor
Volvieron a practicar, por un lado Daiki contemplaba el rostro de Inoo, sabía muy bien cuál era la razón de que apareciera este nuevo Inoo, él… lo sabía; mientras que Inoo se encerraba en su propio mundo.

“¿Qué hora es?” preguntaba a cada momento a chinen quien respondía en cada ocasión “Aun falta para acabar” luego volvía al mundo de los ensayos, ensayos que nunca parecían acabar…

Después de unas horas más practicando el cansancio ganó en ellos, por suerte tendrían el día siguiente para seguir practicando así que cada uno se dirigió a las duchas.
Uno por uno se iba retirando hasta que solo quedaron Inoo y Daiki, el mayor estaba listo antes que el menor por lo cual decidió esperar, pero mientras Daiki demoraba el mayor volvió la memoria a aquel fatídico día o mejor dicho esas dos palabras volvieron a su mente, palabras que lo encerraron impidiendo volver a abrirse con esa persona, solo con él.
-“Te odio” – escuchaba en su mente a cada momento, siempre que estaba cerca de él esas palabras le hacían daño pero aun así… aun así jamás podría esconder la verdad dentro de él porque…
-INOOOO – esa voz y lo sacó de sus pensamientos, claro que también el modo que utilizaba
- Gomen Dai-chan – decía el mayor tratando de dibujar una sonrisa muy débil en su rostro
-Siempre es lo mismo – dijo en un susurro pero aun así en su voz había melancolía y culpabilidad

Ya no podía mas con aquella culpabilidad que lo mataba día a día, si, lo mataba por que siempre le dolía ver como Inoo lo rechazaba, lo rechazaba solo a él y eso dolía, aun peor porque la culpa la tenía él.

Sin pensarlo dos veces se dejo aprisionar por la culpabilidad, culpabilidad que no lo dejo estar en esos momentos solo con Inoo así que se retiró. Mientras bajaba las escaleras a toda marcha, tratando de no derramar lágrimas pensaba… “todo es culpa mía, si yo… si tan sólo… aun seguiríamos siendo tan amigos como antes, aun… aun estaría tan cerca de él”

-Nee Dai-chan no seas malo con esa chica ¿sí?

-…- Daiki sólo escuchaba todo lo que Inoo llevaba diciendo hace más de una hora
- Es simpática, linda, bonita, blanca, mi tipo, tu tipo, tiene buenos gustos, es agraciada – Inoo seguía con el mismo tema
¿Cómo podía decirle eso? ¿Cómo? ¿Acaso aun no se daba cuenta? Se dejó llevar por un dolor y algo más que no supo precisar.
- ¡¡¡YA BASTA!!! ¡¡NO SIGAS!!... YO...¡¡ TE ODIO!! –

Es verdad que había pedido disculpas y estas fueron aceptadas pero después de eso la actitud de su estrella jamás volvió a ser la misma, Inoo… había cambiado y sólo con él. Ese recuerdo hizo que cayeran varias lágrimas por la mejilla de Daiki, lagrimas que tiempo atrás había retenido con esfuerzo, demasiado esfuerzo.
Tropezó, Daiki tropezó pues las lagrimas no lo habían dejado ver bien, al levantarse tomo asiento en uno de los escalones, oculto su rostro con sus brazos los cuales estaban apoyados en sus piernas y ahí muy silenciosamente comenzó a llorar… lloraba por amargura. Mientras lloraba desconsoladamente pudo escuchar muy bajo…
- Dai –

Le sorprendió escuchar su nombre, pero ya no quiso pensarlo dos veces, esta vez le diría todo lo que sentía, sus verdaderos sentimientos se los diría. Inoo se encontraba unos escalones más arriba que Daiki.
- Inoo-kun yo… yo no te odio – cuanto le había costado borrar la sensación que causo en Inoo, esas dos palabras habían sido su gran problema porque aun no sabía por qué las había dicho.
Estas nuevas palabras sorprendieron al mayor, en todos esos días había pensado que el menor lo odiaba, y lo peor de todo fue la inútil idea que se había metido: tal vez si dejara de hablar con el haría que Daiki lo odiara menos, que su Daiki lo odiara menos. Kei quería volver a abrazar a Daiki como siempre acostumbraba pero las lágrimas derramadas por el menor destrozaban su corazón, jamás hubiera querido causar tanto dolor en Daiki pero…
- Shhh, Dai… no pasa nada – el nombrado abrió los ojos al sentir unos brazos rodearlos

- Pero tu… esas dos palabras… yo… – decía Daiki mientras trataba de calmarse
- Fue mi culpa – contestó el mayor muy suavemente mientras acurrucaba al menor en brazos
- No lo fue – contesto Daiki tratando de ver a los ojos del menor – yo estaba… - sin darse cuenta el menor estaba tan rojo como el tomate
- Espera…- Inoo estaba reaccionando
- ¿eh? – “¿y si ya se dio cuenta?” pensó horrorizado Daiki
- No me odias ¿verdad? – Preguntó acercándose más al rostro del menor – entonces…– aquel Inoo volvía a ser el Inoo de antes. “¿tan rápido cambia?” se preguntó extrañado el menor.
- Esto…yo…–Daiki se empezaba a poner nervioso
“No permitiré que se vuelva a repetir, no me quedare callado para ver cómo se destruye de nuevo, esta vez… esta vez… se lo diré” pensó Daiki haciendo memoria

- Inoo-kun yo… tu… - Daiki hablaba muy despacio mientras veía como Inoo se levantaba.
- ¿Nos vamos? - Inoo extendió la mano para ayudar a Daiki –
“No habrá oportunidad para que me deje decírselo”
- Yo…- Daiki quería decirle todo lo que sentía pero tenía miedo, miedo a…-
- Nee Dai-chan si me voy ¿con quién regresas? – Preguntó Inoo con la sonrisa en el rostro
- Ya voy…- y se levantó

Estaban caminando por la calle, ni siquiera sabían de qué hablar, al principio reían y hablaban de todo como en los viejos tiempos, pero algo incomodaba a Daiki y eso se hizo presente en el silencio que los seguía un buen rato. “Se lo tengo que decir, no pienso seguir guardando estos sentimientos más, ya no lo quiero hacer sufrir más, ya no”

- Yo…- dijeron en coro ambos chicos, se miraron un momento luego ambos comenzaron a reír
- Habla Dai –
- Mejor… habla tú –
- Pues ya estoy hablando –
- Eso es trampa –
- ¿Te recompenso con un dulce? –
- ¡Eso es chantaje! –
- Lo sé, y me dices o desaparece el chocolate que tengo conmigo guardado – amenazó en forma burlona
- ¿¿¿¿ehhh???? –
“Me siento cómodo cuando estoy con él, se lo tengo que decir”
- Te odio – salieron de sus labios, el mayor se sorprendió al escuchar esas dos palabras lo cual causo que dejara de caminar para contemplar a Daiki quien dio dos pasos más…
- Supongo que… te hice sufrir – dijo Daiki dejando de caminar para voltear el rostro y dar una sonrisa triste a Inoo
“Su sonrisa… me duele verlo así, está sufriendo” pensó el mayor mientras su corazón se oprimía al ver muy sorprendentemente una lagrima resbalar por la mejilla de Daiki.
- Dai tu…- Inoo se acerco al menor para tenerlo en sus brazos - Shhh… aquí estoy Dai, aquí…-
Cuanto le gustaba sentir los abrazos de Kei, lo amaba tanto, porque jamás desearía hacerle daño, pero volver a acordarse de esas dos palabras tan crueles lo hicieron sentirse mal porque por un momento cambio de bando y se dio cuenta que en verdad esas palabras si dolieron, el dolor no tiene numeración…
- No soy un niño – dijo en un casi puchero el menor mientras se acurrucaba en el pecho del mayor

- Pero… para mi si – contestó - mi niño – dijo en un susurro que Daiki logro escuchar
“Se lo tengo que decir” pensó
- Esas dos palabras las cambio – hablo Daiki mientras seguía en los brazos de Kei
- ¿Qué quieres decir?
- El te odio lo cambio – después de decir esas palabras ambos se separaron quedando con la vista fija en ambos…
- Por… otras dos… palabras – dijo mirando fijamente al mayor, sus nerviosismos trató de hacerlo a un lado – las cambio por… por… - tenía miedo decir esas palabras
- Te amo - expreso Inoo quien sorpresivamente estaba muy cerca del rostro de Daiki
- Te…amo – finalizó Daiki
Luego podía sentir las manos de Kei en su cabeza, mientras este juntaba sus labios con los suyos, luego un suave beso fue dejado en los suspiros de ambos.
Se separaron por que estaban en plena calle, y aunque no pasara mucha gente tenían que ser precavidos.
“Él… él… siempre me quiso, que tonto fui” pensó el menor con la sonrisa en el rostro
- Ahora… ¿quieres el chocolate? – Kei miró con ternura al menor
- Dos palabras
- Ya las escuche –bromeó Inoo – no importa dime
- No quiero – dijo mientras daba pasos hacia adelante, Inoo retornó a caminar a su lado luego de su bolsillo saco una envoltura
- Choco…- pronunció Daiki
- Late – termino Inoo quien abría la envoltura
- ¿Y ahora? – preguntó el menor mientras irradiaba felicidad por todos lados
- Dos palabras
- Copión
- Te amo –dijo antes de dar una mordida a su chocolate – sólo me abstendré hasta llegar a tu casa y de ahí…
- Pobre de mí – dijo el menor en un suspiro
- Pobre de ti no, pobre tu boca
- Ya siento el dolor – bromeó Daiki – pero espero con ganas llegar a casa
-Dos palabras – contestó Inoo
“¿Y ahora qué?” pensó Daiki
-Prepárate, Dai
- Eso fue una pa… – un beso muy rápido de Kei lo calló
- Con esas dos – contestó Inoo

“Después de todo siempre supe que me quería sólo que… me ganaba el miedo” pensó Daiki.

“Amo esas dos palabras… aunque dolieron permitieron que pudiera decir lo que siento, bueno en cierta manera” pensó Inoo mientras caminaba al lado de Daiki rumbo a la casa de este.

FIN