Piano~

Título: Piano~
Autor: Naruchichan
Género: Shonen-ai

Naru me hizo llorar, es tan hermoso! Es que, es simple y sencillamente amor! :3
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Todo sabemos que Inoo Kei ama el piano, es la pasión de Inoo y a lo que más empeño le pone, todos los días practica con el hermoso piano de la JE al terminar con su trabajo, quedándose hipnotizado con el hermoso sonido que las teclas reproducen al compas de sus finos dedos.

Cuando Inoo empieza a tocar el piano no hay poder humano que lo saque de su mundo, porque para Inoo no existe nada más que la música que nace de ese instrumento.

Para Inoo Kei el mundo y sus habitantes dejan de existir mientras el cierra sus profundos ojos dejándose simplemente llevar.

Pero esperen, ¿realmente no hay nada que pueda sacar a Inoo de su trance?, no, no hay nada, pero si hay alguien, un chico con una hermosa y cálida sonrisa, unos ojos brillantes una presencia que enmana siempre alegría y protección, el único ser en la tierra que es más importante que el mismo piano.

-Inoo chan, ¿puedo pasar?– pregunta un chico de mediana estatura desde la puerta del salón de música.
Inoo reacciona de inmediato a esa conocida y para el amada voz, dejando de tocar sin molestia alguna para voltear y sonreírle al muchacho.
-Claro que puedes entrar Dai chan– dice dulcemente viendo como Daiki se acercaba tomando haciendo justo a lado suyo.
-Perdón por interrumpir, sé que no te gusta que te distraigan, pero solo quería saber si nos iríamos juntos a casa...– dice apenado bajando su rostro con un leve sonrojo, pero al sentir la mano de Kei en su mejilla lo levanta para mirarlo a los ojos.
-No me molesta si eres tu el que interrumpe– dice sonriendo– además no eres una distracción, ya que eres la mejor y más grande inspiración que tengo Dai chan.– termina su frase dándole un casto beso en los labios a Daiki.

-Gracias Kei chan… - susurra sonrojado con una hermosa sonrisa en la cara.
-Gracias a ti, y si iremos juntos a casa, deja preparo mis cosas– declara Inoo, pero antes de poder pararse siente la mano de Daiki tomándolo de la manga, obligándolo a sentarse de nuevo.
-No hay prisa, además Inoo chan, por favor toca para mí– le pide volviendo a sonreír, esa sonrisa que se podría decir nunca se va de la tierna y de cierta forma infantil cara de daiki, esa que Inoo tanto amaba.

Inoo se acomoda para empezar a tocar y siente como Daiki se recarga en su hombro, sacándole una sonrisa.
La melodía empieza, relajando los sentidos de ambos chicos, dándoles la sensación de paz que tanto disfrutan, la que solo obtienen al estar juntos.

-Te amo Inoo chan– dice de repente Daiki haciendo que los dedos de Kei pararan de tocar y lo viera directo a los ojos- Te amo como no tienes idea– declara nuevamente sonriendo, tanto con sus labios como con su mirada.
-Yo también te amo, mi Dai chan– Responde el más alto volviéndolo a besar, delicadamente, con todo el amor que puede profesarle sólo así, con un beso, no con palabras.

Sólo hay algo que Inoo Kei ama más que al piano y eso es la hermosa melodía llamada Arioka Daiki.

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