Hora de la Diversión [Drabble]

Título: Hora de la Diversión
Autor: Yuumhi

Género: Yaoi

-Eres un ........ – Gritó Daiki subiendo el zipper de su pantalón, luego de ponerse el bóxer Se puso de Pie, mirando retadoramente al sujeto que se lavaba los dientes en el baño – No razonas, imbécil –

El mayor rió luego de escupir la crema de dientes. Y bufó comentando hacia Daiki.

- ¿y tu si? Mira mi cama, y mira el piso – Señaló. Una noche salvaje y desenfrenada que solo les había pedido sexo sin parar, una noche llenándose de las esencias de los dos, esa habia sido la anterior –

- …me tengo que ir –

- huyes… siempre lo haces – El mayor salió del baño, tomando una camisa de su ropero – tengo que exponer – Suspiró para sí mismo, comenzando a ponérsela –

- Muérete – Rió Daiki, saliendo de la habitación tomando su abrigo colgándola encima de su hombro. Ya se la pondría en el camino.

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- Estoy aburrido – Suspiró Kei llegando de la Universidad, tirando sus bolsos encima del sofá – ya se. Marcaré a Daiki – Sonrió tontamente, buscando el numero de su amigo, para llamarlo y quedar en algo.

A los cuarenta minutos, Daiki apareció con una sonrisa macabra en el rostro. Sabía que nadie podía estar mucho tiempo, lejos de él. Era así, su naturaleza enviciaba a los demás, como también su cuerpo. Y qué? Ya no era el niño que se paraba riendo y creyendo lo que los demás decían o hacían, mucho menos el niño que se burlaba de las chicas, ya no. Ahora era el niño activo.

- Sé que soy irresistible, pero deberías dejarme descansar. – Pasó riendo – Este cuerpo se cansa, después le salen arrugas –

El mayor frunció el ceño, No le gustaba nada cuando el menor hablaba así, nada. Pero se suponía que debía estar acostumbrado al nuevo estilo de Vida de su amigo, sin embargo, ese no era de su agrado. Bueno, siempre y cuando no lo hicieran… Porque cuando lo hacían, todo de él le agradaba completamente. Todo.

- Deberías dejar este juego - Comentó en tono de broma –

- Después quien podría complacerte? – Rió Daiki enlazándose en el cuello de Kei, besando sus labios coquetamente y hambriento. – A mi puede complacerme Yama-chan, pero tú eres difícil de complacer amigo mío –

-estás jugando sucio Dai – comentó sin quitar esa mirada seria de su rostro – aun cuando lo sabes estás jugando así? –

-hora de la diversión Kei, - Rió llevando la cabeza hacia atrás bailando levemente, mientras movía las caderas tomando asiento en el escalón más próximo. Comenzando a bajar el zipper de su casaca.

El y su maldita manera de volver loco a Kei, el mayor se mordió el labio para no caer en las provocaciones que su amigo le tendía. No quería hacerlo, no cuando descubría que Daiki había estado con alguien antes que él.

- Kei, si no quieres hacerlo, dímelo – Se acercó corriendo a su oído mordiendo los extremos de su oreja, lamiéndola al mismo modo y succionándola – Entonces yo tomare la iniciativa – Descaradamente acercó la palma de su mano, al centro de sus piernas, rozándola juguetonamente mientras la apretaba poco a poco. Directamente comenzó a quitarle la casaca a Inoo, alzándole con una mano la polera que llevaba puesta, agachándose levemente para lamer su abdomen.

-bien – Se puso derecho – Así será hoy día – Se lamió los labios, apareciendo de un lado el cinturón de Inoo. Este recién reaccionaba, en qué momento se lo había quitado? Se alertó sabiendo lo loco que a veces podía ser el menor, alejándose pocos pasos de él. Pero Daiki tomó su mano jalándolo hacia él, juntándola con la otra mano rápidamente y comenzó a hacer uso del cinturón.

-que… que vas a hacer? –

- Vamos a divertirnos Kei –

- no Daiki… Hoy no quiero hacerlo… ouch – EL menor había amarrado sus manos con el cinturón fuertemente para evitar que este se pudiera zafar del amarre. –

El menor sonrió. Siempre lograba lo que quería, y ahora solo quería una cosa, acostarse con Kei. No un momento, todo el día teniendo relaciones con él y solo con él. Al poco rato, Kei estaba siendo “arrastrado” por Daiki, hacia la habitación del mayor, donde lo tiró suavemente pero con firmeza en la cama, dejándolo boca arriba. Y Desabrochando su pantalón, metió su mano por debajo del bóxer.

-De acuerdo, no lo harás Hoy… - El menor acercó sus labios a los del mayor – Lo hare yo –